Dos mil años después seguimos
… en Belén, en un pesebre, y al que llamaron el Mesías, el Salvador
… ¿No es inverosímil que esto ocurra, año tras año?
… traía una enseñanza que nunca se había oído con tal fuerza
… que resonará hasta hoy: «La verdad os hará libres»
… en la llamada “Cristiandad”
… de la fundación de las universidades en el mundo
… de la empresa española en América, que fue, principalmente, una empresa cristiana
… se tenga fe o no, impregna nuestra forma de vivir como personas y como sociedad
… el cuidado de los enfermos, de los niños, de los pobres, la solidaridad de la pena y la alegría compartidas
… la justicia, el perdón y la esperanza
… El premio de esta búsqueda de la Verdad, a través del amor, es la libertad
… escuela de libertad para el resto del mundo, incluso refugio y amparo de los que la habían perdido
… mucho más que una simple tradición: la Navidad y el Belén … debe guiar toda vida humana digna de tal nombre. Es nuestra Historia misma, la razón de nuestros esfuerzos de cada día, y el futuro al que aspiramos, con alegría y esperanza